“La Guerre est déclarée” representará a Francia en la 84 ceremonia de los Oscar

La película "La Guerre est déclarée", de Valérie Donzelli, descubierta en el último Festival de Cannes por la sección paralela La Semana de la Crítica, fue seleccionada para representar a Francia en la 84 ceremonia de los Oscar.
La película que aspira a hacerse con el Oscar al mejor film extranjero, según anunció el Centre du Cinéma et l'image animée (CNC), es el segundo largometraje de la realizadora francesa.
Además de dirigirla, Valérie Donzelli protagonizó la cinta junto con su ex compañero, Jérémie Elkaïm, con quien vivió en persona la tragedia de una pareja en guerra contra el tumor cerebral de su bebé, tal y como narran en el filme, cuyo guión escribieron a cuatro manos. La producción corrió a cargo de Rectangle Productions, en asociación con Wildbunch, precisó el CNC.
La actriz Jean Moreau, los directores Bertrand Blier, Luc Jacquet y Philippe Pollet-Villard y el presidente de la Academia de los César, Alain Terzian, formaron parte de la Comisión que seleccionó La Guerre est déclarée.
Más allá de estos cinco miembros elegidos por el ministro francés de Cultura, la comisión contó con sus dos miembros de derecho, el delegado general del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, y el presidente del sistema de financiación de ayudas al cine "Anticipación sobre ingresos", Paul Otchakovsky.
El pasado mayo, cuando estrenó la película en Cannes, donde fue recibida con lágrimas y ovaciones, la realizadora dijo haber querido contar ante todo "una historia de amor" filtrada por una prueba de gran calibre.
La película, que desde entonces ganó numerosos premios en diferentes festivales, llegó a las carteleras en Francia el pasado 31, donde sigue proyectándose con éxito.
Según su autora, "La Guerre est déclarée" comparte "el mismo proceso de utilizar algo vivido de manera triste para hacer algo positivo", al que recurrió ya su primer largometraje, "La Reine des pommes", en el que hablaba de una ruptura amorosa y que rodó en un momento en el que se sentía deprimida.
"Es lo que para mi es el cine: partir de mi ombligo y hacer un zoom hacia atrás para contar algo más universal: la relación con la educación, el hecho de ser padres y estar confrontado a lo peor que puede ocurrir: tener un hijo entre la vida y la muerte", explicó el pasado mayo en Cannes.